martes, 16 de octubre de 2007

FAMILIA


Contenido Neto


LA CRITICA * INVENTARIO



4-Octubre-07

Publicado en MILENIO DIARIO



Hoy se cumple una semana de la inauguración de la exposición Inventario, en Ex Teresa Arte Actual, donde el artista Benjamín Torres presenta una serie de esculturas e instalaciones consistentes en “la selección, intervención y redistribución de objetos e imágenes provenientes de los medios impresos, la publicidad y el consumo cotidiano”. Hace algunos meses presentó en Nueva York la exposición Contenido neto, de la que rescata algunas piezas coladas en yeso. También es importante mencionar la exposición Derivados, en la Galería MDF, de la Ciudad de México, reseñada en este espacio (MILENIO, 30/03/06). Con seguridad se trata de una coincidencia, la palabra “Inventario” proviene de la misma raíz latina que “inventar”, in-venire, o traer hacia el presente. Y sorprende que sea la característica más destacable de este artista, su capacidad de “re-inventar” su producción como escultor. Mientras el mundo comercial del arte dicta a los artistas que deben ser sintéticos y reconocibles (tantos son los casos), Torres opta por profundizar en los temas y las formas que le interesan, que quizá no coincidan con los designios del curador o galerista de turno. Conocido en el pasado por un trabajo predominantemente manual, en esta ocasión el artista se ocupa del producto serial sometido a un proceso. La obra que más claramente muestra dicha experimentación es Escultura secuencial, pieza in-situ que se relaciona con la nave principal del ex-templo de Santa Teresa la Antigua, hoy convertido en centro de arte. La instalación consta de 480 rollos de papel higiénico de 480 hojas, la secuencia es simplemente la sustracción de una hoja a la vez, hasta llegar al carrete en el que viene enrollado el papel. La escultura mide 40 metros de largo, una medida dada por las características del material, comienza en la pared de fondo de la nave, atraviesa todo el espacio, se topa con la pared opuesta y pasa hasta el vestíbulo. Crea una tensión con el sitio donde se ha instalado y con sentido del humor nos comunica a través de un objeto de uso diario, el imperceptible paso del tiempo.



Lorenzo Rocha

miércoles, 3 de octubre de 2007

INVENTARIO Exposicion de BENJAMIN TORREs



La Desviación en el Supermercado

Hoja de Sala de la Exposición INVENTARIO
Benjamín Torres
En Ex Teresa Arte Actual

Resulta paradójico llegar a un ex convento, lugar histórico que encierra un pasado religioso Ex Teresa - Arte Actual, para convertirse en muestrario de lo que circula en el arte contemporáneo. Esta contradicción se remata abruptamente por la muestra titulada INVENTARIO. Empezando por la religiosidad con la que Benjamín Torres ha tomado a la escultura tradicional, trasformándola y dejándose transformar por ella. Hasta llegar al punto más radical de su carrera en donde todo lo que hacía deja de ser en forma, más no en esencia.
El proceso constructivo de su obra mantiene las técnicas básicas de la escultura como cortar, rasgar, tallar, pegar, montar, intervenir pero la materia prima con la que lleva a cabo su producción se altera significativamente. ¿A qué me refiero con esto? Transportémonos al supermercado e imaginemos que los productos que están ahí dejan de cumplir únicamente las necesidades básicas para las cuales fueron elaborados. Iniciando así lo que Benjamín Torres nombra de manera muy particular cada una de las tres etapas que conforman el proceso de producción de su obra. La primera etapa consiste en: la selección de los productos a partir de los significantes publicitarios que funcionan como generadores de ideas. Ya no importa el producto en términos de consumible sino que el empaque, junto con la publicidad y el contenido se vuelven una especie de oferta creativa. Un ejemplo que ilustra esta transformación está en la película Punch-drunk love, cuando Barry Egan se encuentra en el supermercado descubriendo la promoción que hay en los productos “Healthy Choice “millas gratis de viajero frecuente” -compre 10 productos y reciba 500 millas de viajero frecuente-, decide así comprar millones de paquetes de budín de chocolate, por la oferta que trae el producto. Benjamín Torres hace sus compras no para llenar su despensa, sino al igual que Barry Egan su propósito es aprovechar la publicidad para transformar la mercancía en una nueva mercancía.
Observa las etiquetas, los empaques, deambula por los pasillos, selecciona y entonces sí, juega con los productos hasta satisfacer el inventario de sus ideas. El proceso lúdico al que entra Benjamín no se queda en el goce estético, sino que entre la selección y el proceso transitan sus propios gustos, prejuicios, seducciones y fastidios. Dando paso a la segunda etapa: el procesamiento mediante un método personal, basado en la instauración de reglas propias que le ayudan a desarrollar mecanismos de construcción para sus nuevos productos, los cuales están por de más llenos de sentidos irónicos, sexuados, grotescos y chistosos.
Cuando llega del supermercado a su taller arranca un análisis concienzudo y minucioso de cada uno de los productos que echó al carrito. Experimenta con las posibilidades de resignificación que existen en la libre ociosidad que desempeña con gusto, a través de técnicas que por de más primitivas, le sirven. Interviene los productos con cortes, pegotes, rasgaduras, huecos, construyendo y multiplicando los sentidos que descubre desde su naturaleza como escultor. Se confunde entre el espacio atiborrado de publicidad y la concepción espacial de los objetos que elabora. El supermercado se desvanece poco a poco para convertirse en taller en el cual exprime cada una de las imágenes publicitarias que logró acumular.
Selecciona los productos, procesa la publicidad y llega a la etapa final: la redistribución de las piezas en una nueva red en la que su finalidad es el consumo. Disecciona el producto para re-habilitarlo como mercancía, pero lo trasciende de estatus al dejar de ser el consumible práctico, para convertirlo en un nuevo producto, en una obra de arte contemporáneo. Con un valor simbólico muy por encima del valor de uso en que lo adquirió. Además de todas las connotaciones generadas por el ejercicio de observar más allá de lo evidente, Benjamín remarca el carácter de fetiche que cualquier producto lleva consigo y altera el modelo de producción, distribución y consumo por el que pasa la mercancía. Partiendo del último eslabón de la cadena se ubica en su condición de consumidor para entrar al procesamiento analítico del objeto que se transforma en obra. Deja de ser un producto en serie y se convierte en múltiple, deja de ser materia prima procesada por las fabricas, para ser procesada por su mente, intuición y manos. Quien descompone y agrega nuevos factores simbólicos que liberan al producto de la industrialización, pero lo mantiene como mercancía.
¿A qué se deben estos giros significativos en sus intervenciones? La carga irónica revela lo que la convención da por entendido. Benjamín Torres no inventa discursos, sino que enfatiza los mensajes velados que la publicidad traen consigo. Es decir, ¿rompe con las fantasías de la imaginación, trasforma los mensajes pero sin salirse del sistema propuesto por el consumo? Juegan en exceso sus sentidos. Compra todo tipo de bebidas, cereales, golosinas que deleitan su paladar visual. Se mofa al tiempo de encantarse. En pocas palabras, como escultor inventa una fábrica de disparates y contradicciones formales. Como estratega, hace de la publicidad su INVENTARIO, masticando la carga semántica que finalmente le agrega a cada objeto.
Así podemos decir que Benjamín trasforma el acto cotidiano del consumir en una aventura que despunta en los largos pasillos del supermercado expandiéndose a cualquier lugar.

diana maría
agosto del 2007

BOLETIN PARA MEDIOS



INVENTARIO

Benjamín Torres
Del 27 de septiembre al 04 de noviembre 2007


* Intervención y re-distribución de objetos e imágenes provenientes de los medios impresos, la publicidad y el consumo cotidiano

*El rollo de papel de baño propuesta de escultura secuencial

*Ironiza, se mofa y enfatiza los mensajes publicitarios de los productos de consumo


Inventario exposición que se genera en los pasillos de un supermercado, lugar en donde el artista obtiene la materia prima para realizar instalaciones, collages y esculturas, obras de arte que se redistribuyen como objetos consumibles pero ahora con una carga simbólica diferente y con un precio muy por encima del original, se inaugura el jueves 27 de septiembre 2007 a las 20:00 hrs. en Ex Teresa Arte Actual. Licenciado Verdad 8 Centro Histórico. Entrada Gratuita

Benjamín Torres quien realizó estudios de arte en Nueva York y en la Ciudad de México, mantiene algunas técnicas básicas de la escultura para realizar las piezas que conforman la muestra, así cajas de cereales, jugos, etiquetas u objetos son cortados, rasgados, tallados, adicionados con pegotes, montados e intervenidos para lograr dos grandes instalaciones y una serie de objetos escultóricos y collages.

La nave principal de Ex Teresa Arte Actual se divide en dos por una larga y angosta repisa que contiene 450 objetos, todos ellos intervenidos por Torres. Las piezas colocadas una de tras de la otra aparecen en continua evolución como sí se tratara de una muestra de la infinita transformación del objeto que deja de cumplir las necesidades básicas para la cual fue creada originalmente. Esta escultura secuencial, evidencia el desgaste del objeto cotidiano.

Benjamín remarca el carácter de fetiche que cualquier producto lleva consigo y altera el modelo de producción, distribución y consumo por el que pasa la mercancía. Partiendo del último eslabón de la cadena se ubica en su condición de consumidor para entrar al procesamiento analítico del objeto que se transforma en obra de arte.

Para la realización de su obra Benjamín Torres pasa por tres etapas: La selección, el procesamiento y la redistribución. La primer etapa se genera en una visita al supermercado y en la elección de los productos; la segunda es en su taller donde analiza cada producto y lo interviene para enfatizar el sentido irónico, sexuado, grotesco y chistoso de la publicidad o la forma del empaque. En esta etapa el producto en serie, el múltiple, deja de ser materia prima procesada por las fabricas, para ser procesada por su mente, intuición y manos. El artista descompone y agrega nuevos factores simbólicos que liberan al producto de la industrialización, pero lo mantiene como mercancía. La última etapa abre una nueva red en la que su finalidad es el consumo, con un valor simbólico muy por encima del valor inicial, para finalmente presentarlo en galerías o museos.

En la capilla de las ánimas Torres propone una serie de cerámicas de formas fácilmente reconocibles, triángulos de juego Boing; botes de leche de un litro tipo Tetrapack; envases de gelatinas, vasos tipo sopas Maruchan, recipientes de Yakult... entre otras figuras, que a pesar de la blancura y textura austera, libre de toda referencia tipográfica y figurativa, resulta curioso que sepamos perfectamente de qué producto sé trata.

En uno de los vestíbulos el espectador podrá encontrar una serie de 30 collages realizados con cajas de cereales en donde se enfatiza el estilo barroco y grotesco del diseño publicitario que acompaña a estos productos. En contraste también presenta una serie de trabajos donde las cajas de bebidas como jugos y leches son rasgadas o agujeradas para crear imágenes casi minimalistas que por la austeridad de los elementos (una naranja repetida en serie o una mancha que simula el cielo azul) otorgan al espectador paz visual.

En otro de los vestíbulos Torres coloca un espectacular, un cartel (que el público podrá llevarse) y el original, todos ellos de una etiqueta manipulada, se trata de una marca de agua donde aparece el dibujo de una familia tradicional (dos hijos, mamá y papá), pero en esta ocasión la mamá aparece decapitada.
En esta misma sala habrá dos volantes (también de obsequio al público) collages donde aparece una mujer sexy en una carnicería.

Una repisa tipo mostrador con 80 piezas tridimensionales intervenidas, 25 de ellas cajas de cereal serigrafiadas y el resto piezas sueltas de cáscaras de naranja, racimos de uvas, vasos de lecha y empaques, conforman la muestra que estará abierta al público hasta el 4 de noviembre del 2007, los horarios de visita son de lunes a domingo de 10:00 a 18:00 hrs. Entrada Gratuita.


Contactos:

Benjamín Torres artista visual
benjamíntc@hotmail.com

Beatriz Garduño, Difusión Ex Teresa Arte Actual
5522 9093 y 5522 2721

exteresa_arteactual@yahoo.com.mx